Cirugía para pechos asimétricos: una solución para cada caso

La cirugía para pechos asimétricos permite corregir, entre otros aspectos, la desigualdad de tamaño y/o forma entre un seno y otro. Si bien es natural que las mujeres no tengan ambas mamas idénticas, en ocasiones la asimetría es muy evidente y provoca, incluso, problemas de autoestima.

Con esta clase de intervención se consigue recuperar la armonía en el pecho, remodelando las mamas para que sean mucho más parecidas, e incrementando su atractivo. Sin embargo, en la cirugía para pechos asimétricos no existe una única técnica, sino que el cirujano emplea una u otra (o varias) según la problemática a solucionar, ya que no todos los senos asimétricos presentan las mismas características.

En este artículo puedes informarte sobre esta operación y los distintos procedimientos que puede incluir, así como los resultados que se pueden obtener con ella. Y, también, conocer cuáles son las pautas generales tanto del preoperatorio como del postoperatorio.

El concepto de simetría en el cuerpo

En el cuerpo humano hay muchos órganos duplicados, como los senos. Estamos compuestos, debido a nuestra simetría bilateral, de dos mitades casi idénticas, la izquierda y la derecha. Pero ese «casi» es muy relevante en el asunto que nos ocupa, porque esas dos zonas no son exactamente iguales. Cada persona es única en ese sentido, y las pequeñas diferencias son naturales y no rompen la belleza.

De cualquier modo, esa simetría corporal es la que produce la armonía visual cuando nos miramos al espejo. Por ello, cuando hay diferencias significativas, las «rechazamos» y deseamos corregirlas. En esta línea, una asimetría grave en las mamas puede generar en la mujer un descontento que afecte a su autoestima, y le cree obstáculos emocionales. Pero con la cirugía para pechos asimétricos es posible solventar esa sensación.

Tipos de mamas asimétricas y técnicas

Los senos visiblemente asimétricos pueden deberse a diferentes factores: si un seno es mucho más voluminoso que el otro, si está más caído, si es tuberoso, etc. Por tanto, no existen unos determinados ‘tipos de mamas asimétricas’ como tal; cada paciente presenta unas necesidades particulares de corrección. Hasta las areolas pueden ser muy distintas, por ejemplo.

Un cirujano experimentado evalúa cada caso y propone a cada mujer las técnicas más idóneas para lograr la simetría buscada. Puede ocurrir que se necesite realizar una mastopexia para elevar el seno más caído, o que haya que introducir un implante en la mama con menos volumen. De hecho, en muchas ocasiones no solo se opera un seno, sino que se tratan ambos para alcanzar unos resultados óptimos.

Asimismo, a veces se recurre a la grasa propia para mejorar el resultado final, ya que esta se introduce minuciosamente en cada zona y favorece una remodelación más precisa.

Antes y después de la cirugía para pechos asimétricos

Preoperatorio

Antes de llevar a cabo esta intervención, el especialista te indicará las pruebas que son necesarias, como un análisis sanguíneo, una mamografía, una radiografía torácica y un electrocardiograma, por lo general. Los resultados de dichos procedimientos permitirán verificar si se puede efectuar la operación.

Postoperatorio

Una vez fuera de quirófano, deberás llevar un sostén postquirúrgico. Aproximadamente, durante los siguientes diez días se producirá la primera fase de recuperación. Durante ese periodo te recomendarán un reposo moderado, pero en pocas semanas ya te sentirás completamente recuperada.

Pero, ¿cuál es la causa de la asimetría mamaria?

No solo hay una; esta anomalía puede tener origen genético, hormonal o deberse al proceso de crecimiento y/o envejecimiento. Pero lo más común es que los motivos estén relacionados con procesos como el embarazo, la lactancia o las grandes pérdidas de peso.